domingo, 8 de marzo de 2009

Mis horas de licencia, por Roberto S


El día 10 de marzo, me agarró la justicia. Desde ese día estaba peleando para que me dieran el permiso para salir a mi casa para estar con mi hija y mi señora, para disfrutar de mi familia.
El 27 de Diciembre me dieron la primer salida transitoria. Con los psicólogos y la asistente social y mi conducta insistimos al Juzgado para que me dieran esto que el juez decidió que sí, pero con una condición: que sea con el servicio de seguridad.
Hasta que llegó el día y la hora. Me bañé y salimos para mi casa. Llegué a las nueve de la mañana y pude estar con mi hija y mi señora. Las abrazé y las besé mucho.
Fuimos para la casa de mi tía. Se puso re contenta. No lo podía creer. De ahí salimos a pasear. No quería que pasen más las horas.
Después fuimos un rato para el barrio para hablar con los pibes de un par de cosas. Mucho no pude hacer porque eran muy pocas las horas que me dieron. Estaba a full, andaba de acá para allá con mi familia, hasta que se me terminaron la horas. Fue la parte más fea del día. Tuve que despedirme de mi familia, llegaron los empleados y me trajeron de vuelta al instituto. Tenía unas re ganas de no volver, pero tenía que volver.

1 comentario:

  1. En la vida siempre hay momentos lindos y feos.
    Lo positivo es que lo hayas podido disfrutar aunque fueran pocas horas y pensá que vas a tener otros momentos como ése. Vivilos con intesidad y te servirán de apoyo y alegría para pasar un poquito mejor aquellos en los que estás internado.
    Susana

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